sábado, 23 de abril de 2016

Cuando los animales nos dan una lección de humanidad

Mica cuidando a Zampa. 21-4-2016
Zampa es una perra que adoptamos (¿o nos adoptó ella?) hace aproximadamente ocho años. Lleva varios meses haciéndose pruebas porque no se encuentra bien. El día 21, se encontraba tan mal que las veterinarias que la atienden decidieron que se quedara en la clínica veterinaria, donde le fueron administrando por vía intravenosa la medicación que necesitaba. 
Mi marido y yo nos turnamos para estar con ella todo el tiempo; pero no fuimos los únicos que la cuidamos... Mica, la perrita negra de la fotografía, fue adoptada  al igual que Zampa cuando tenía poco más de un año. Cuando estaba yo acompañando a Zampa después de salir del colegio, Mica se acercó a saludarme (es la perrita de una de las veterinarias) y, sin dudarlo un momento, se acurrucó al lado de Zampa, como muestra la foto. Cuando Zampa se movía, ella levantaba la cabeza comprobando qué le ocurría. Así estuvo toda la tarde: levantándose a ratitos y acurrucándose para darle cariño: cuidándola continuamente como ella podía.
Cuando nos dijeron que nos podíamos ir, las dos perritas se despidieron con alegría. Estoy segura de que, en su lenguaje, Zampa le dio las gracias y Mica se sintió feliz de verla mejor.
Mica acababa de dar una lección de empatía y "humanidad" que los humanos deberíamos aprender.
¡Gracias, Mica!